El actual senador provincial celebró la decisión que tomaron tanto el sindicato de la Industria de la Pirotecnia (Sueipa) como la Cámara Argentina de Empresas de Fuegos Artificiales (Caefa), pero agregó que “todavía es imprescindible que se trate la ley “Elegí Luces” que presentamos todos estos años en el Congreso para que en Argentina finalmente se pueda regular la fabricación y el uso de pirotecnia, necesaria para proteger y cuidar a miles de familias de niños y niñas dentro de la condición del espectro autista que se ven afectadas. Como también las otras miles de personas que lamentablemente tienen que sedar a sus mascotas”.
A propósito, el proyecto “Elegí Luces - Regulación del uso de artefactos de pirotecnia para uso recreativo”, presentado por el médico Bucca, expresa en su artículo 1 que “debe prohibirse en el ámbito de la República Argentina, la comercialización, exhibición, tenencia, manipulación, uso particular, fabricación, depósito, transporte, distribución y venta al público mayorista o minorista y venta ambulante en la vía pública, de artificios pirotécnicos de uso recreativo, cuyos efectos audibles, lumínicos, fumígenos, químicos y/o físicos resulten perjudiciales para la salud y bienestar de la población y el ambiente”.
Este proyecto fue construido y trabajado durante años por el legislador junto a diversas asociaciones de padres de personas con autismo, protectoras de animales y del ambiente de todo el país: Apadea, TGD padres TEA, PANAACEA, Fundación Brincar, Liga Asperger 7, Asociación Asperger Argentina, Tendiendo Redes, Desvío Animal, Proyecto 4 Patas, Dejando Huellas, TGD padres TEA red federal, Sapaab.
En este sentido Bucca aclaró que “no se trata tanto de prohibir, porque de hecho, siempre planteamos el reemplazo por fuegos artificiales lumínicos, como los que se fabrican en otros países”, y agregó que “el gran objetivo del proyecto fue siempre despertar la empatía de las y los argentinos, que conozcan el daño que la pirotecnia sonora les genera a las personas con hipersensibilidad auditiva.”.
Se estima que en Argentina hay más de 700 mil personas dentro de la Condición del Espectro Autista (CEA). La estadística mundial dice que 1 de cada 58 niños es diagnosticado con CEA y, según lo expresado por sus familias, son los niños los que más sufren: se tapan los oídos, tienen crisis de llanto e incluso llegan a autolesionarse. “El ruido elevado daña y lo que para algunos pocos es diversión, para muchas familias argentinas significa pasarla mal. Estoy seguro que esta ley va a marcar un punto de inflexión en la sociedad. Tenemos la obligación que se respete y garantice el derecho de todos de disfrutar las fiestas” añadió el legislador nacido en Bolívar.