Con motivo de conmemorarse la Semana Mundial por el Parto y Nacimiento Respetado, desde el 15 al 21 de mayo, las fundadoras de la Asociación Civil Doulas Comunitarias, Pelusa Moledo y Flavia Montaldo, quienes brindaron una clase en la Diplomatura en Puericultura el sábado pasado, ofrecieron detalles sobre el rol de la dula y el Parto Respetado.
¿Qué es y qué hace una Doula?
La Doula es la mujer que acompaña a otra mujer en situación de parto. Ese acompañar es un acompañar amoroso, un acompañar emocional. Si bien una Doula realiza una formación, donde aprehende muchos conocimientos de situaciones especiales que se dan en una mujer en el parto, el acompañar de la Doula es necesario para el corazón, por decirlo de alguna manera. Para la embarazada es estar con otro que la entiende, que la protege, la cuida, le da confianza.
¿Desde cuándo comienza ese acompañamiento?
Las Doulas acompañamos en todo el proceso, desde el pre-parto, parto, hasta el pos-parto inmediato. Puede ser una misma Doula que esté durante todo el proceso, o distintas y que sólo participen en alguna de estas etapas.
¿Cómo es su trabajo con el equipo médico?
Siempre trabajamos en conjunto, porque el equipo médico es quién acompaña a la madre en el parto y luego, en el pos-parto también entran a intervenir las Puericultoras por ejemplo.
¿Cómo interaccionan con las Puericultoras?
Para nosotras son muy importantes porque ellas aportan todo un conocimiento que tiene que ver específicamente con el vínculo con el bebé: la lactancia, la crianza. Luego del nacimiento, la Doula acompaña una o dos veces, en cambio, la Puericultora, se instala al lado de la mamá.
Experiencia de Voluntariado en el Hospital de Morón
Desde hace 5 años trabajamos en el Hospital de Morón, donde tenemos el voluntariado instalado haciendo 12 hs. de guardia todos los días del año, cada Doula cumple una guardia de 6 hs. En total somos un total de 50 voluntarias.
¿Cómo es la recepción de las mamás?
¡Fantástica! Todo el grupo familiar nos recibe muy bien. A veces las mamás ya saben que en el Hospital hay Doulas, porque han hecho el curso de pre-parto, porque han tenido una continuidad y una conducta de pertenencia a la institución; otras mamás que llegan a la guardia no saben, pero igualmente luego se da un acompañamiento hermoso.
El recuerdo que tiene esa mamá del parto es maravilloso, es el recuerdo de que no estuvo sola, que tuvo una mano que le dio aliento, que la abrazó, que la acarició, que la abanicó, el abanico es el aliviador que trae aire fresco en momento de tanto esfuerzo.
¿En cesáreas también están presentes?
Si, nuestra tarea no es aportarle nada al equipo médico, sino a la mamá; le sostenemos la mano, la tranquilizamos, hacemos el primer minuto del apego sosteniéndole al bebé en la teta, es muy hermoso. Amamos esta tarea, dice Montaldo.
Lo que transmitimos es que se puede tener un parto mejor, que se puede tener un parto respetado, se puede compartir un parto respetuosamente y se pueden lograr nacimientos mejores. Como decía Michel Odent, nuestro gran referente. "Para cambiar el mundo, primero debemos cambiar la forma de nacer".